El gobernador sostuvo que no apoyará para presidente a ningún dirigentes del peronismo federal porque son “más de lo mismo”.
El gobernador de Santa Fe, Miguel Lifschitz, anunció que “de ninguna manera” apoyará candidaturas de dirigentes del peronismo federal como Sergio Massa, Juan Manuel Urtubey o Miguel Pichetto, ya que a su entender representan “más de lo mismo”, y en cambio volvió a postular al ex ministro de Economía Roberto Lavagna por considerarlo “algo nuevo” y “transversal”.
Consultado sobre un eventual respaldo suyo a candidaturas de Alternativa Federal, el mandatario socialista rechazó tajantemente esta opción: “No. De ninguna manera. Creo que podemos construir algo con muchos dirigentes de Alternativa Federal y de otros sectores políticos, pero tiene que ser algo nuevo”.
“Si no, es más de lo mismo. No se diferencia demasiado de otros proyectos que ya están en la disputa electoral”, añadió. Por el contrario, destacó que si el candidato “fuera Lavagna, que representa una mirada de mayor amplitud por su historia política y su trayectoria, y si fuera rodeado de un equipo multipartidario”, sería “posible” avanzar en un acuerdo electoral de un espacio amplio que tercie entre Cambiemos y el kirchnerismo. “Yo no me voy a sumar a un proyecto de un sector del peronismo, Eso está claro. Si entre todos podemos armar un proyecto nuevo, es otra cosa. Algo nuevo. Eso sí puede tener futuro en la Argentina”, enfatizó en diálogo con el portal de noticias Infobae.
Viabilidad
Sobre la viabilidad de la construcción de un proyecto electoral de estas características con Lavagna a la cabeza, Lifschitz resaltó que dependerá de varios factores.
“Las viabilidades en política hay que construirlas. Es un nombre. No alcanza con un nombre. Hay que armar un equipo, un proyecto político, una propuesta que sea transversal y convoque a los argentinos. Que convoque a dirigentes del peronismo, a los que han estado cerca del kirchnerismo o los que están o estuvieron en Cambiemos. No hay que vetar a nadie”, pregonó.
En ese sentido, destacó que el economista que comandó el gabinete económico de Eduardo Duhalde y los primeros años del mandato de Néstor Kirchner es el indicado para conducir la Argentina de los próximos años, en el marco de un gobierno que deberá ser “de transición”.
Poner al país en la senda
“Hace falta un gobierno que no se proponga dar vuelta la Argentina y generar un nuevo movimiento por 100 años, ni se proponga trabajar por la reelección, sino un gobierno de cuatro años que busque poner al país en la senda del desarrollo con inclusión social”, planteó.
Lifschitz se mostró muy crítico del rumbo económico del macrismo e hizo hincapié en la evolución negativa de los números de la inflación, de la deuda pública, del PBI, de la pobreza y la desocupación.
“Si nosotros arrancamos en 2015 con una inflación del 25 por ciento y tres años después tenemos una del 50 por ciento, quiere decir que algo está mal. Hoy las cosas van para otro lado. No estamos con crecimiento sino con recesión. Tenemos más deuda pública que antes y más compromisos internacionales. Estamos acotados con un acuerdo con el FMI. Tenemos más pobreza y desocupación. Los resultados nos están mostrando que el camino elegido no es el correcto”, completó.
“El presidente propone profundizar el modelo y Cristina volver al pasado, volver a la experiencia que mostró sus limitaciones para resolver los problemas de la Argentina”, dijo el gobernador en pos de diferenciarse de las dos fuerzas que hoy hegemonizan el mapa político de la Argentina.